Todas las edificaciones de concreto presentan un problema de goteras en algún momento, por ello es importante colocar barreras impermeabilizantes para impedir el ingreso de humedad
De una u otra forma todas las edificaciones residenciales e industriales tienen un problema de goteras en alguna etapa de su vida, esto se debe entre otros aspectos a ciertas características del concreto.
Sin duda alguna el concreto es el material de construcción más utilizado en el mundo, porque es económico, accesible y de fácil manejo, entre otras características. Sin embargo tiene el problema de ser quebradizo.
De una forma simple, puede decirse que una vez que el concreto es aplicado y éste cura, por diversas razones se forman micro y macrofisuras que permiten el ingreso de humedad a la estructura, es más, aún sin estas fisuras, el concreto permite el paso de la humedad porque tiene un cierto grado de permeabilidad, este aspecto es doblemente dañino porque por un lado se producen filtraciones y por otro lado, la humedad que ingresa al concreto arrastra diversos compuestos (como los cloruros) que causan corrosión en el acero de refuerzo y se forma un círculo vicioso:
Ingresa humedad al concreto, esta humedad corroe el acero de refuerzo, el acero de refuerzo se hincha presiona al concreto y se producen más fisuras, hay mayor ingreso de humedad, se incrementa la corrosión… hasta que la estructura falla.
Por tales motivos es muy importante colocar barreras para impedir el ingreso de humedad al concreto, estas barreras son los impermeabilizantes que pueden ser de muy diversos tipos, pero los más comunes son los acrílicos y los asfálticos.
En edificaciones el ingreso de humedad se da por dos vías principales: techos y pisos y sótanos. Los techos son los más vulnerables por estar en contacto con el exterior y porque una pequeña falla en el drenaje pluvial o la falta de éste en la azotea, permite la formación de charcos, que pueden permanecer por mucho tiempo y favorecer el ingreso de humedad.
Otro aspecto importante es que la mayoría de las filtraciones tiene su origen en lugares diferentes a la zona donde está la gotera y esto pasa porque el agua siempre busca el camino más fácil y se mueve a través de las fisuras hasta que encuentra una salida y se produce la gotera.
Los pisos y sótanos tienen una problemática similar pero inversa, en lugares donde el nivel freático es alto o la tierra es húmeda, la estructura de concreto absorberá humedad si no se coloca una barrera impermeable entre la tierra y la loza. Esta problemática es muy común, por ejemplo cuando se quiere colocar piso epóxico en instalaciones industriales, si la humedad es alta el piso se despegará y lo mismo pasa en las casas, sólo que se manifiesta en las paredes; se ha observado que en la parte baja de algunas paredes se despega la pintura y se forman manchas blanquecinas que la gente llama “salitre”, ésta es la manifestación del avance de la humedad de la tierra sobre la estructura porque no se colocó una buena barrera impermeable entre la cimentación y las paredes.
Los sótanos son otro caso, aquí lo que pasa es que la humedad del suelo humedece el concreto y avanza hasta cruzar la estructura, observándose pequeñas gotas y en ocasiones verdaderos escurrimientos, cuando esto pasa los contratistas prueban todo lo existente en el mercado tratando de resolver el problema, sin embargo si se hubiera colocado una barrera entre el suelo y la pared de concreto la humedad no hubiera pasado….
¿Cómo controlar esto?
Colocando sobre la superficie del concreto un recubrimiento que tenga buena adherencia al concreto, la suficiente elasticidad para mantener su integridad sobre la formación de macro y microfisuras y los movimientos de contracción y dilatación que por efecto de variaciones de temperatura tiene el concreto, que no se disuelva cuando está bajo agua porque la azotea está encharcada o porque el nivel freático sea alto y que tenga buena resistencia UV, entre otras características…
La nueva línea de impermeabilizantes de 3M ofrece sistemas que tienen estas características, por ejemplo: el impermeabilizante de emergencia llamado “tapagoteras de emergencia” puede aplicarse durante la lluvia o incluso bajo el agua, no requiere preparación de superficie, simplemente se toma con una brocha y se aplica este producto, a diferencia de materiales asfálticos, tiene una excelente adherencia al concreto así como baja viscosidad, de tal forma que fluye por fisuras y las sella instantáneamente.
El impermeabilizante para techos Scotchkote Poly-Tech de 3M se aplica de forma sencilla y requiere membrana de refuerzo, es muy fuerte, está garantizado por 5 años, durante los cuales usted no tendrá que hacer absolutamente nada; la mayoría de los impermeabilizantes del mercado requieren aplicaciones de mantenimiento cada año o simplemente duran la temporada de lluvia y al siguiente año se presenta nuevamente la gotera. Este impermeabilizante es tan fuerte, que se utiliza en fuentes.
Otro producto desarrollado para evitar la filtración de humedad en paredes de concreto es el denominado 5620-RI que es un material que al aplicarse sobre paredes de concreto utiliza los mismos componentes del concreto para formar un gel penetrante que sella la porosidad y produce una barrera impermeable que resiste presiones negativas muy altas.
Finalmente, hay otro problema con el concreto: “el concreto nuevo no pega con el concreto viejo” para reparar concreto no se debe usar concreto, sino compuestos de tipo epóxico, 3M tiene un producto denominado Scotchkote epoxy concrete repair “Reparador Epóxico para Concreto”, producto que tiene una extraordinaria adherencia al concreto y es mucho más fuerte que el concreto mismo, se utiliza para sellar principalmente lo que se denomina “junta fría” que es la unión de concreto nuevo con concreto viejo y que es el típico lugar donde ocurren filtraciones principalmente en techos y sótanos.
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